La gente sigue manifestándose pidiendo que suban más las pensiones. El nivel de desinformación de la mayor parte de los jubilados es entristecedor. Todo el dinero que fueron pagando durante sus años como empleados se lo han gastado los políticos. No hay un enorme almacén lleno de dinero para ir pagando cada mes una pensión decente a quien se jubiló con 65 años y va a vivir hasta los 100 años (si no se muere de hambre o de cualquier enfermedad para la que no podrá ser tratado porque no habrá dinero para eso tampoco).
La esperanza de vida sube, el número de hijos por familia baja y los políticos, por un lado se gastan todo lo que pueden cuando están en el poder para contentar a la gente y, por otro, piensan: el que
venga detrás ya se las arreglará (porque no encontrará ni un céntimo en el armario del dinero del Gobierno).
Quienes desde jóvenes se apuntaron a hacerse un plan de pensiones privado y eligieron bien la compañía que se lo haría puede que puedan contar con esas pensiones privadas. Aunque si una economía quiebra hay mucha gente que intentó hacerlo bien pero es arrastrada por la quiebra que puede aparecer en forma de hiperinflación, como les ha pasado más de una vez a los hermanos latinoamericanos e incluso nos pasó a nosotros.
Nadie quiere hablar de este problema. Hay mucha gente mayor que dispone de más tiempo e iniciativa y está dispuesta a manifestarse y más en nuestro país, donde tenemos un clima excelente para pasear por la calle. Pero pasear tranquilamente, aunque griten cuando les enfoca una cámara, tiene un límite y algún día, aunque se trate de personas mayores, el tema puede crear crispación.
Los políticos piensan: “Bien, si un día no se pueden pagar pensiones, les subiremos los impuestos a los “ricos” y que las paguen ellos”. Los “ricos” serán los que ganen más de 20.000 euros al año seguramente. Los “ricos” de verdad se las irán arreglando para emigrar a sitios donde el tema esté mejor resuelto.
¿Tiene alguna solución el problema? Pues sí: atrasar de forma importante la edad de jubilación. Si la gente se jubila cinco años más tarde, aporta dinero para su plan de jubilación cinco años más y cobra su jubilación cinco años menos. Eso sí, necesitaríamos unos políticos honrados que no se gastasen el dinero recaudado para la jubilación en organizar campañas políticas en su beneficio, o en comidas, coches, viajes innecesarios, como todos vienen haciendo.
Pero ¿quién explica eso a los que ya se han jubilado o a los que se van a jubilar? Desgraciadamente hay muchas personas que desean jubilarse. Su trabajo no les gusta, su jefe no les gusta, los jóvenes que tienen debajo les miran y ellos ven en sus ojos que están pensando: “¿Por qué no se morirá este?”. En ese entorno hostil, muchos concluyen que lo mejor es irse, aunque la alternativa no sea agradable.
En los primeros años que lancé mi escuela de dirección de empresas en China (Ceibs), me encontraba con directivos de importantes empresas europeas para explicarles el proyecto y ver si les podíamos ayudar a formar a su gente en China y si ellos me podían ayudar a desarrollar mi escuela allí. La verdad es que muchos de aquellos directivos estaban haciendo una gran labor, querían trabajar, se sentían muy satisfechos con los resultados que conseguían en China y veían muy interesante el potencial de la escuela para preparar a sus directivos. Hablando en confianza, muchos me decían que si se hubiesen quedado en Europa los habrían prejubilado. Pero en aquellos años nadie quería irse a China así que si se iban los mantenían empleados. Por lo que me han explicado algunos, nunca nadie les agradeció aquel esfuerzo. Somos así.