Conocí esta asociación cuando unas antiguas alumnas del IESE me contactaron para que diese una conferencia en su reunión anual que sería en Seattle y me pidieron si podría invitar a alguna empresaria china para que diese una conferencia sobre la economía de su país. Una de las mejores exalumnas de mi escuela de China es Yang Lan, que montó varias empresas pero la más conocida era un canal privado de televisión, el único que había en China. Yang Lan se movía muy bien y fue quien consiguió los Juegos Olímpicos de Pekín, entre otras muchas cosas.
La idea de dar prioridad a alguien por ser hombre nunca me ha parecido correcta
En la reunión de IWEC en Seattle les entusiasmó tanto la señora Yang Lan que me pidieron que les organizase su encuentro del año siguiente en China. Lo hicimos y, por supuesto, la señora Yang Lan participó y todo funcionó muy bien.
A mí la idea de dar prioridad a alguien por ser hombre nunca me ha parecido correcta. La razón para elegir las personas debe ser su preparación, su calidad, su experiencia, su formación, pero nunca que sea hombre o que sea mujer. Cuando lancé en mi escuela IESE el fondo de capital riesgo Finaves, entre quienes mostraron interés la persona con el mejor currículum era una exalumna del programa máster que estuvo encantada de hacerse cargo de la dirección. Años más tarde le ofrecieron otro puesto muy importante en el IESE y tuvimos que buscar otra persona que resultó también ser una mujer. También contratamos a una abogada para gestionar de forma legal correcta el fondo y sus inversiones. Afortunadamente sigue llevando todos los temas legales del fondo y debe ser la abogada que más sabe de inversiones, gestión y buenas o malas desinversiones en fondos de capital riesgo. Con este fondo se ha contribuido a crear más de 50 empresas.
En mi escuela de China, cuando se decidió lanzar el programa máster, el primero en el país, la persona más adecuada fue una prestigiosa profesora americana que había trabajado unos años en China. Fue un gran éxito. Cuando conseguí adquirir una escuela en Suiza, me ayudó mucho una exalumna de mi centro de China, una buena ejecutiva que quiso ser profesora allí. La cogí como directora y contribuyó extraordinariamente a integrar la filial de Suiza en mi escuela de China.
Para mí lo que importa no debe ser el que se trate de una mujer o de un hombre. Lo importante debe ser la preparación, los valores y el interés en el tipo de trabajo. Tampoco debe pagársele más a un hombre que a una mujer en un puesto determinado. Parece que vamos avanzando y la asociación IWEC está contribuyendo a este avance.