Sin duda la crisis del Covid-19 marcará un antes y un después. Pero las crisis no marcan el final de nada, son realmente el comienzo. Muchos pensadores relacionan las crisis con una quiebra de valores que hay que revisar y renovar. También se dice que el Covid-19 es la forma en que el planeta tierra protesta del abuso físico y moral al que le somete el homo sapiens.
En cualquier caso, no pretendemos analizar aquí las causas de esta crisis sino cómo podemos las personas enfocar sus consecuencias. Si ponemos el foco solamente en la enorme pérdida que hemos sufrido entraremos en una espiral oscura que nos conduce al victimismo y la inacción.
RENOVACIÓN: REAPRENDER Y MEJORAR NUESTRA MEJOR VERSIÓN
Si vemos esta crisis como una oportunidad de renovación saldremos fortalecidos y beneficiados. En otras palabras, lo importante es entender que es nuestra actitud la que condiciona como será nuestro futuro próximo: puede ser un camino seco, pedregoso y hasta trágico o bien una maravillosa senda hacia un jardín de nuevas oportunidades. Esta es la gran noticia. Está en nuestras manos la oportunidad de aprender y desarrollar nuevas habilidades, el reto de cambiar. La oportunidad de crecer y transformarnos en una nueva o incluso mejor versión de nosotros mismos. Hablamos de resiliencia en cuanto a la forma de encarar la adversidad pero siempre para abordar el proceso de cambio con flexibilidad y esperanza.
MOMENTOS DE PARADA PARA EL CAMBIO
Los grandes cambios de la humanidad siempre se han producido después de guerras, crisis económicas y grandes epidemias. Ahora, después del confinamiento a muchos nos toca reinventarnos. Es el momento perfecto para realizar una introspección y reflexión personal y profesional y reorientar nuestra carrera con nuevas coordenadas que se ajusten mejor al nuevo entorno.
UN PROCESO DE ADAPTACIÓN CON MENOR ESFUERZO
Después de años ayudando a nuestros clientes durante su proceso de definición o reinvención, una de las cosas que he aprendido es la importancia de la capacidad de adaptación. Ahora cobrar mucha importancia las llamadas “soft skills”, la gestión y desarrollo de las personas, de trabajar toda la parte emocional para adaptarnos mejor a nuestro nuevo entorno profesional y de vida. En nuestro proceso de prospección emocional y racional realizamos la búsqueda para encontrar el talento individual que todos llevamos dentro (viene “de serie”). Nuestra misión y propósito es descubrir, definir y enfocar estas habilidades, aptitudes, inclinaciones y pasiones en la dirección más eficiente y potenciadora para cada persona. Con ello conseguimos reducir significativamente el esfuerzo de adaptación a niveles manejables. En otras palabras, cuando descubrimos nuestro Talento, nos adaptamos con relativa facilidad al cambio y nos reinventamos con menor esfuerzo y obtenemos mayores posibilidades de alcanzar altos niveles de eficiencia y satisfacción personal. En definitiva, lo que ocurre es que sube nuestra autoestima, crece nuestra capacidad de aportar servicios y productos y además somos mucho más útiles y felices.
ELEVAR NUESTRA AUTOESTIMA Y CAPACIDAD, NOS LLEVA A MAYOR UTILIDAD Y FELICIDAD.
En estas líneas quisiera dejar un mensaje de esperanza a muchos que nos hemos visto en la necesidad de reinventarnos. Yo lo hice cuando el sector en el que trabajaba entró en una crisis irreversible y me quedé sin trabajo, sin foco y no sabiendo donde hacer crecer mi potencial y servicio.
Recordar que nunca es demasiado tarde, tengamos la edad que tengamos. Detrás de esto empieza una nueva etapa y es tu oportunidad de conectar tu talento con el mundo.
¡Reinventémonos juntos!
Patricia Jessen
Fundadora y Directora de Tú Marcas la Diferencia
www.tumarcasladiferencia.es