RESEÑA ABE BARCELONA 3: 16 de septiembre de 2024 – con Joaquín Luna, periodista, corresponsal de La Vanguardia y escritor
El lunes 27/5/24, contamos con Carles Cabrera, vicepresidente de l’Institut Cerdà y gran colaborador de ABE-L en sus inicios, que nos habló, de su trayectoria profesional y de la importante labor que hacen en el Institut Cerdà desde hace 40 años, ante la asistencia que fue la siguiente:
- Carles Cabrera, director general de l’Institut Cerdà
- Jordi Fortuny, Periodista y secretario de la junta de la societat catalana de comunicació
- Nacho Gallostra, Socio director RSM y tesorero de ABE
- Narciso Berberana, CEO Catalunya Agbar y Chief Strategist Officer Veolia
- Ginés Alarcón, Senior Advisor y consejero independiente
- Fran Ripoll, Presidente C.N. El Balis, senior advisor y consejero independiente
- Jesús Ruiz, Gerente de Joves Empresaris, AIJEC y vocal de ABE (con dudas)
- Oriol Laporte, Senior advisor, consejero independiente y vocal de ABE
- Anna Garau, Directora de Esnet Consulting & Management
- Juan Ramón Rodríguez, presidente de Ausil Systems y vicepresidente de ABE
- Santi Tarín Puig, presidente grupo Master Consulting y vicepresidente de ABE
En el horario previsto Santi toma la palabra, agradeciendo la presencia de Carles y de los asistentes, que a continuación se presentan brevemente para mejor conocimiento de todos.
Santi pasa la palabra a Carles quien comienza diciendo que el Institut nació en 1984 por iniciativa de Pere Durán Farell junto a 8 ingenieros de caminos. Los fundadores, una vez finalizada la exposición sobre Ildefons Cerdà para la cual fue fundada, tuvieron sus discrepancias sobre cuál tenía que ser el futuro de la Fundación. Pere Duran puso como condición que cualquiera que fuera la actividad del Institut, éste debería ser autosuficiente económicamente. Han tenido siempre obsesión por la solidez patrimonial. No cuentan con accionistas.
Cuentan con 14 patrones en el instituto y en breve tendrán dos personas más llegando al límite de 16 que establecen los Estatutos de la Fundación.
El Institut se centra en proyectos emblemáticos, actúan como consultora y comenta los realizados como, por ejemplo, el lanzamiento de las ZALs en España. Juegan siempre con los vectores de innovación, colaboración público-privada e independencia.
Son una fundación, sin soporte de terceros.
Los proyectos que lanzan y proponen a empresas e instituciones normalmente son un “parto” de nueve meses.
Él se incorporó en 1988, antes había trabajado en planificación de puertos y en el plan hidrológico del Pirineo Oriental y en 1986 en IOR.
Desde su incorporación en 1988 hasta 1994 estuvo muy a gusto, nunca había estado tan bien.
Le contrataron para el periodo 1988-1990 pero luego siguió y muchos otros también y los gastos de personal se dispararon.
Perdían 600.000 por año y llegaron a tener un agujero de 2,4 millones. El director anterior no hizo una buena gestión.
Pere Duran era el presidente y también de Gas Natural y dejó la presidencia del Institut en 1993 y se incorporó Jordi Mercader como nuevo presidente. Gracias al apoyo de Jordi Mercader, de los miembros del Patronato y del equipo del Institut se consiguió revertir la situación.
Gabriel Ferrater, el siguiente presidente hizo una gran gestión y actualmente Salvador Alemany también enorme.
Le propusieron ser director con Jordi Mercader de presidente y tras dudas finalmente lo fue.
Jordi Mercader es alguien que con una mirada tiene suficiente para aprobar o criticar, pero lo más importante fue su apoyo en momentos críticos que comprometían la viabilidad del Institut. Así, entre 1996 y 2000 lograron superar el bache, pero por el camino perdieron talento, no lo pudieron retener.
Jordi Mercader puso un “controller” en 1996 y ahora siguen teniendo a un secretario del patronato que sigue haciendo esta función.
Cuando Jordi Mercader fue nombrado presidente de Agbar y vicepresidente de La Caixa dejó el Institut. Pide a los patronos quien quiere ser presidente y acaba proponiendo a Gabriel Ferrater.
A Gabriel Ferrater nadie le podía decir que no. Ha sido fundamental que ningún patrón haya aportado encargos y sí, en cambio, su conocimiento, contactos, experiencia, etc.
La obsesión de Jordi Mercader fue salvar la entidad y la de Gabriel Ferrater en 2004 hacerla crecer. Salvador Alemany ha entendido muy bien lo que el Institut puede ofrecer. Dice haber aprendido mucho de los tres. Él no se siente fuerte en la gestión de personas ni en la organización.
En 2010-11 estuvo con los hermanos Roca, del Celler de Can Roca, con quienes tiene amistad. Mantuvieron reuniones durante cuatro años, 3.000 horas de trabajo y de ello salió un libro que está publicado.
Los hermanos Roca están muy bien organizados y gestionan muy bien las personas, por ejemplo, cuando alguien entra empiezan por presentarle a su madre.
El libro contó con tres amigos y lectores críticos de los cinco primeros capítulos y con sus comentarios decidió cambiar el enfoque.
Él es profesor asociado de Esade y del comité de ética de Caritas, analizando que los donantes cumplan con los requisitos y propósito ético de Cáritas.
Juan Ramón pregunta por los valores de l’Institut y Carles responde: Innovación e Inconformismo.
Por ejemplo, el centro outlet de La Roca él lo vio en USA y lo trajo aquí, aunque inicialmente no tuvo aceptación. Santi interviene diciendo que también ha conocido el proyecto en USA y que Salvador Alemany es un presidente de lujo para el Institut.
Nacho pregunta como seleccionan los proyectos y Carles pone como ejemplo el servicio de gestión de crisis que permitió la internacionalización del Institut en Chile mediante Aguas Andinas.
Carles continúa explicando que estableció un viernes al mes en el Institut para hablar entre todos y no trabajar en proyectos, lo aprendió de los Roca, que lo hacen los martes por la mañana antes de abrir.
Viven de las ideas de los clientes.
Jordi Fortuny pregunta como ve la Innovación y el Inconformismo en Catalunya ahora. Carles responde que a él le preocupan las personas. Cree que se ha de predicar con el ejemplo, por ejemplo, la puntualidad. Le preocupa no saber transmitir a las personas y sobre todo a los jóvenes el espíritu de la innovación.
Uno de los problemas del Institut es que no es posible desconectar de los proyectos el fin de semana. Por ejemplo, el lee el Wall Street journal cada día.
No contrata a personas de más de 32 años porque sus referencias de sueldo son difíciles de acometer por el Institut.
Ahora en el Institut hay un cambio organizativo, han promocionado a un nuevo director general, que empezó de becario y él ahora ha pasado a vicepresidente.
En 2008 pasaron de lo público a lo privado y el riesgo de contar con cartera de proyectos crece exponencialmente.
En la celebración del 40 aniversario dijo que habiendo superado la crisis del 96 todo es posible.
No han continuado con los estudios de la Unión Europea, porque no visualizaban al cliente.
Fran dice que es curioso que Carles hable de que la gestion de las personas le sea farragosa y hable de trabajo en equipo. Carles dice que cuando una persona le falla lo pasa muy mal. Dice que es muy intenso en su gestión, reconoce tener un problema que si alguien hace algo que no le gusta no se lo dice de forma inmediata y va acumulando el desencanto.
La consultoría tiene la característica de que la velocidad la marca el cliente. Contar con un equipo que lo entienda y lo lleve bien, no es sencillo.
En el Institut es necesario tener capacidad de trabajar con una hoja en blanco.
Se siente orgulloso del Fondo de Emprendedores hecho para la fundación Repsol y que lanzaron conjuntamente en 2011.
Narciso pregunta como consigue aunar la diversidad de personas y el trabajo en equipo y pregunta también por la razón del prestigio alcanzado.
Carles dice que cuando llegó había muchos ingenieros y aunque él es ingeniero lo ha cambiado.
Siempre pregunta a los entrevistados, a todos antes de entrar, si alguna vez han hecho algo raro.
Son 30 y pico personas.
Tienen un perfil bajo de comunicación, por tanto, su prestigio se basa en los trabajos realizados. Dice que la forma de presentar al Institut es decir que son únicos, hay muy pocas organizaciones con el perfil y el objetivo de Institut.
En consultoría los proyectos dependen de quién hace el trabajo, es decir, de la consultora, las soluciones son distintas.
Actualmente, están trabajando con empresas que tienen actividad e impacto en el mundo rural. En 2022 empezaron el proyecto, consiguieron sintonía con las empresas y lograron que hablasen de sus proyectos entre ellos. Inicialmente era difícil definir el producto, pero gracias a la colaboración entre ellos y las empresas han conseguido dar un servicio a medio y largo plazo.
Otro ejemplo del compromiso con la innovación fue la prueba piloto de Servicaixa que se realizó en el Institut entre 1988 y 1990.
Santi como organizador toma la palabra agradece a Carles su exposición, a los asistentes su presencia, le regala a Carles el libro de ABE y cerramos el acto con un efusivo aplauso.
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